Esta vez si es cierto. Barcelona y Madrid se verán mañana las caras en el Camp Nou en esa primera final de las dos que disputarán los dos equipos en toda la Liga. Ambos conjuntos llegan tras golear en la competición local, y tras derrotar a sus respectivos adversarios en la Champions League. Los dos se han distanciado poco a poco del tercer clasificado, el Villarreal, y mañana uno de ellos será el primer ganador de esa liga particular que disputarán durante toda la temporada.
Todo está preparado en el feudo culé para otro partido del siglo. Típico tópico que en este caso más que nunca se acerca a la realidad. Cara a cara estarán dos de los mejores entrenadores del mundo en la actualidad, Pep Guardiola y José Mourinho, los dos mejores jugadores del mundo, Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, y nada más y nada menos que doce campeones del mundo repartidos entre los dos conjuntos. Quizá, lo único que sobra y que menos gusta a la afición en general es el arbitraje, ya que Iturralde González no es del agrado de ningún aficionado al fútbol español.
El Real Madrid se presenta en la ciudad condal con la intención de arrancar los tres puntos. La última vez que los madridistas consiguieron la victoria en Barcelona fue en la temporada 2007/2008, con un solitario gol de Baptista. Desde entonces las visitas al Camp Nou se han saldado con dos derrotas consecutivas. En esta temporada el club merengue viaja con las ganas e ilusiones renovadas, con la mentalidad ganadora de la que ha carecido en temporadas anteriores y que les ha inculcado José Mourinho, y dispuestos a todo para mantener la primera posición que posee en la tabla clasificatoria. Las nuevas incorporaciones madridistas tienen ganas de conquistar la casa culé, el Madrid se presenta con Özil cuajando algunos partidos impecables, con un Khedira silencioso y trabajador, un Carvalho denostado a comienzos de temporada y que ahora ha dejado a muchos en silencio y Di María sobresaliente. Con este plantel el Real Madrid tendrá mucho que decir en Barcelona.
El F.C. Barcelona, por su parte, recibe a los blancos con la idea previa de ganar el encuentro. Si bien son conscientes de que la igualdad es esta temporada mayor que en las dos anteriores, en las que el maravilloso juego culé no encontró rival en los madridistas, la victoria local sería lo más común y lógico. El conjunto de Pep ha ido creciendo en nivel desde su inicio de temporada. Con partidos llenos de dudas en casa –recordad la derrota frente al Hércules y el empate frente al Mallorca en los meses de septiembre y octubre respectivamente-, en la actualidad parece que los culés han ido renovando su imagen y se han acercado al juego que encandiló a todo el planeta durante dos temporadas, si bien el fichaje más importante de la pretemporada, David Villa, no ha terminado de arrancar en su racha goleadora. Ahora es el momento de dar muestras de que ese juego no es una moda y que todavía tienen mucho que ganar.
Mañana lunes a las 9 de la noche el cuero rodará por el césped culé y se verá quien se lleva el que parece ser el primer match ball de la temporada. La vuelta será a las puertas del Domingo de Ramos. Pero de momento disfruten del fútbol de mañana.
Imagen de Empatados.com
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